Introducción:
Génesis 2 nos muestra el diseño perfecto de Dios para la humanidad. Él nos creó con propósito, estableció el matrimonio y nos dio una relación con Él. Hoy veremos tres aspectos fundamentales del plan de Dios para nuestras vidas.
I. Dios nos creó con propósito
Génesis 2:7 Entonces Jehová Dios formó al hombre del polvo de la tierra, y sopló en su nariz aliento de vida; y fue el hombre un ser viviente.
Dios nos formó con sus propias manos, mostrando su cercanía y amor.
No somos un accidente, sino una creación intencional con un propósito Jeremías 29:11.
Nuestra vida solo tiene sentido cuando la vivimos en relación con Dios Efesios 2:10.
II. Dios estableció el matrimonio
Génesis 2:18, 24 No es bueno que el hombre esté solo; le haré ayuda idónea para él. [...] Por tanto, dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y serán una sola carne."
Dios diseñó el matrimonio como una unión sagrada entre un hombre y una mujer.
Es una relación de compañerismo, apoyo y amor Efesios 5:25.
Refleja la relación entre Cristo y la iglesia Efesios 5:31-32.
Génesis 2:15-17 Tomó, pues, Jehová Dios al hombre, y lo puso en el huerto de Edén, para que lo labrara y lo guardase. Y mandó Jehová Dios al hombre, diciendo: De todo árbol del huerto podrás comer; mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás."
Dios colocó al hombre en un lugar de provisión y comunión con Él.
La obediencia a Dios trae bendición, la desobediencia trae consecuencias Deuteronomio 28:1-2.
A través de Cristo, podemos restaurar nuestra relación con Dios Juan 14:6.
Conclusión:
Desde el principio, Dios estableció su diseño perfecto para la humanidad: nos creó con propósito, instituyó el matrimonio y nos llamó a vivir en comunión con Él. Aunque el pecado rompió esta armonía, en Cristo encontramos restauración y vida abundante. Hoy, la invitación es a vivir conforme al plan de Dios y disfrutar de su presencia en cada área de nuestra vida.